Súper volcanes y mega terremotos
Indonesia con sus volcanes y Chile con sus terremotos, registran la mayor liberación puntual de energía del Planeta Tierra. Ambas regiones forman parte de ese enorme “cinturón de fuego” que rodea al océano Pacífico. Decir que va a haber erupciones volcánicas o terremotos violentos en el Cinturón de Fuego del Pacífico, como circula en forma alarmante en las redes, es una obviedad. Esa es la naturaleza de dicho cinturón y allí han ocurrido los grandes eventos de liberación de la energía endógena del planeta en las últimas decenas de millones de años.

Ahora bien ¿Pudo la especie humana haber desaparecido? Sí. ¿Cuándo? Hace 75000 años. ¿Cómo? A causa de un evento endógeno mayúsculo. ¿Qué evento? Una erupción volcánica excepcional. ¿Dónde? En Indonesia. ¿Por qué? Porque dicho evento cambió y alteró los ecosistemas mundiales con la inyección de billones de toneladas de polvo en la atmósfera y sus consecuencias directas sobre el clima. Efectivamente hubo en Toba (Indonesia) un fenómeno volcánico de altísima explosividad que casi borra de la faz de la Tierra al género humano. Recién ahora se sabe del alcance y la magnitud que tuvo este desusado evento geológico que pudo haber cortado con miles de millones de años de evolución terráquea hasta llegar a los primeros humanos avanzados. Téngase en cuenta que para entonces el enorme continente americano, desde Alaska hasta Tierra del Fuego, estaba despoblado y lo mismo probablemente ocurría con otras masas terrestres como Australia y obviamente la Antártida.
La liberación de energía planetaria, sea por mega terremotos o súper volcanes está curiosamente concentrada en unos pocos lugares. Dado que el planeta tiene una corteza activa, con placas tectónicas que se mueven en todas direcciones, sea hundiéndose, desgarrándose o colisionando entre ellas, lo lógico sería que la energía estuviera distribuida en forma más o menos regular. Sin embargo eso no ocurre y son pocas las zonas donde se producen mega eventos sísmicos o volcánicos. Si pensamos en sismicidad, Chile y parte del borde pacífico sudamericano, concentran casi el 50 por ciento del total de la energía sísmica que se liberó a escala planetaria en el siglo XX. Eso es realmente asombroso y motivo de estudio de los especialistas en sismología de todo el mundo. Lo mismo ocurre con la energía volcánica liberada en la región de Java y Sumatra, donde hubo erupciones súper volcánicas como la del Toba, y también en el siglo XIX las del Tambora y Krakatoa.

Esto no quiere decir que no se hayan registrado eventos catastróficos, tanto de volcanes como de terremotos, en otros lugares del mundo, sino que hay dos regiones en el planeta como son Chile e Indonesia, que registran la mayor liberación de energía porcentual, sísmica y volcánica, respectivamente. Algo pasa en esos lugares y es lo que los geólogos intentan dilucidar. Las islas de Sumatra y Java en Indonesia tienen tres súper volcanes con mega erupciones históricas. El Toba, ubicado al norte de Sumatra, es uno de los más violentos de la historia y produjo una erupción extraordinaria 75.000 años atrás. En el lugar quedó un gigantesco cráter o caldera, ocupado hoy por un bonito y apacible lago navegable, que tapa las huellas de lo que pudo haber sido el inicio del final del género humano. Efectivamente el lago de 100 km de largo, 30 km de ancho y 500 m de profundidad es una caldera volcánica de donde salieron expulsados materiales incandescentes que cubrieron de cenizas una amplia región de Asia y enfriaron dramáticamente el clima del planeta. Se calcula la eyección en 2800 kilómetros cúbicos de materiales ígneos, un volumen que resulta difícil de dimensionar. Las cenizas bloquearon la luz solar y enfriaron el planeta unos 5 grados y hasta 15 grados en las latitudes altas. La erupción del súper volcán Toba está considerada la más grande erupción volcánica del planeta en los últimos millones de años. Lo cierto es que en el lugar quedó para la posteridad el lago de origen volcánico más grande del mundo.

Otra de las erupciones gigantes, esta vez con registro histórico, fue la ocurrida en el volcán Tambora de Indonesia en 1815. Se estima que más de 75.000 personas fallecieron como consecuencia de la erupción que se escuchó a 2000 km de distancia. Se calcula en unos 100 kilómetros cúbicos el volumen de material expulsado, el cual se inyectó en la atmósfera y se distribuyó en el hemisferio norte bajando la temperatura del planeta y causando una tremenda hambruna. A 1816 se lo designó como “el año sin verano”. Más de la mitad del volcán, que superaba los 4000 m de altura, desapareció con la erupción. Tal vez resulte más conocido el nombre de Krakatoa, otra de las increíbles erupciones históricas que tuvo lugar en 1883, entre las islas de Java y Sumatra, en Indonesia. La isla de Krakatoa voló literalmente por los aires en una erupción de tal magnitud que la explosión se escuchó a 5000 kilómetros de distancia. La erupción y el posterior tsunami, que llegó hasta las costas de Chile, dejó un saldo de 36 mil muertos. Como se aprecia los tres volcanes con mega erupciones históricas, -Toba, Tambora y Krakatoa-, se encuentran en Indonesia, junto a otros 130 volcanes activos que convierten a Indonesia en el país con más volcanes activos en el mundo.
Algo similar puede decirse de los terremotos en el margen sudamericano, especialmente en Chile. El 22 de mayo de 1960, a las tres de la tarde, ocurrió en Valdivia el más tremendo terremoto de que se tenga noticia histórica. La magnitud se calculó entre 9,4 y 9,6 lo cual representa una descomunal energía liberada. El evento duró diez minutos y disparó olas de tsunamis que golpearon lugares remotos del Pacífico como Hawái, Japón, Filipinas, Nueva Zelanda, Australia y las islas Aleutianas. Las olas del tsunami alcanzaron hasta 25 m de altura en la costa chilena e incluso olas de 10 m de alto llegaron hasta Hawái y se registraron incluso a 10.000 kilómetros del epicentro. Todo el océano Pacífico se batió como si hubiesen tirado una piedra en un estanque. Cientos de otros sismos han ocurrido en esa región de Chile, algunos comentados por viajeros famosos como Charles Darwin. Muchos han ocurrido en épocas en que no se tenían mediciones sismológicas y sólo las páginas escritas por quienes los sufrieron dan cuenta de su dimensión.
El último de ellos fue el 27 de febrero de 2010, a las tres de la mañana, y alcanzó una magnitud de 8.8 con una duración de tres minutos. Según el ranking mundial de sismos se trató del quinto evento en magnitud. Con ello Chile concentra dos de los mayores eventos de liberación mundial de energía. Los otros sismos que se cuentan entre los diez peores de todos los tiempos son el de Alaska de 1964 con magnitud 9,2; el de Sumatra en 2004 con magnitud 9.1; el de Japón en 2011 con magnitud 9; el de Kamchatka en 1952 con magnitud 9; el de Ecuador en 1906 con magnitud 8.8; Alaska en 1965 con magnitud 8,7; Sumatra en 2005 con magnitud 8,6 y Tíbet en 1950 con magnitud 8,6. De acuerdo con los registros sismológicos del último siglo, los terremotos de mayor magnitud se dieron en regiones bien definidas como Chile, Alaska e Indonesia. En el caso de Indonesia hay una conjunción entre mega eventos volcánicos y mega terremotos.
Las placas tectónicas son las responsables del volcanismo y de los eventos sísmicos. Lo que no se termina de comprender es qué mecanismos interactúan para lograr que en esos lugares se produzca una liberación de energía de tal magnitud. Se ha propuesto la velocidad de las placas, los ángulos de subducción, la profundidad de penetración, los tamaños de las cámaras magmáticas, los cambios bruscos de rumbo, entre otros. Una discusión amplia sobre algunos de estos temas puede consultarse en mi libro: Alonso, R. N., 2016. Los Desastres Naturales: Geológicos, Climáticos, Cósmicos. Prólogo de Dr. Douglas Burbank. 1a ed.- Salta: Mundo Gráfico Salta Editorial.170 p.; 22 x 15 cm. ISBN 978-987-698-133-0. Salta.
La erupción del súper volcán Toba hace 75 mil años y el súper terremoto de Chile de 1960, mantienen el ranking de los episodios endógenos terrestres más violentos de la era humana.