Urtubey pateó el avispero de los “concursos” judiciales tramposos
No es un conflicto de poderes… es un conflicto de valores.
“… no tengo miedo a nadie, tampoco le tengo miedo a Dios porque es justo, a la justicia no hay tenerle miedo…”
“… Que se escuden en todos los cargos que quieran. Realmente no me tiembla el pulso…”
“… no puedo convalidar hechos que son irregulares porque yo termino siendo cómplice…”
“…yo no estoy acá para defender a las corporaciones…”
“… la sociedad lo que me exige es generar mayor transparencia en esto, si hay que modificar la ley del Consejo de la Magistratura la vamos a modificar…”
“… ¿Cómo se explica a la sociedad que por distintos artilugios corporativos el Poder Ejecutivo, y particularmente el gobernador de la provincia, termina siendo cómplice de la irregularidad?...”
Lo que se suponía un trámite de designación de jueces más derivó en un conflicto de poderes sin precedentes en la provincia. Evidentemente la corporación judicial no midió la reacción de un gobernador que hasta ahora, luego de nueve años al frente del Ejecutivo, nunca había puesto reparos (o al menos de este modo) al de por sí polémico sistema de elección de magistrados. El cual, vale decirlo, siempre estuvo sospechado de parcialidades por acomodos de distinto orden, provengan estos del campo político o de la misma “familia judicial”, cuando no por presentar directamente concursos arreglados.
Esta vez la reacción de Juan Manuel Urtubey ante denuncias públicas y hasta un recurso de amparo dejó mal parado a un Consejo de la Magistratura que sin salir todavía del asombro decidió reaccionar abroquelándose corporativamente, o lo que es lo mismo: cerrar los ojos y embestir apelando a la consabida chicana de que procedimentalmente el concurso se hizo en forma regular, objetando la pertinencia de la nulidad del mismo dispuesta vía decreto por Urtubey.
Lejos de aflojar, Urtubey redobló la apuesta reafirmando su decisión de ir hasta las últimas instancias, planteando además su decisión política de reformar la ley del Consejo de la Magistratura.
Mientras esperaba la decisión de una Corte de Justicia Ad Hoc que se conformó especialmente ante la excusación de seis de sus magistrados, Urtubey salió a la palestra de los medios para dejar bien sentada su postura.
En una entrevista con el colega Mario Ernesto Peña (Compartiendo su mañana – FM Aries), el gobernador dijo que no dará un paso atrás ante la presión de la corporación judicial y que no le temblará el pulso a la hora de cambiar el sistema. Lo hizo en los siguientes términos:

Hubo una decisión por parte suya días pasados con respecto a la Justicia, de devolver o decir señores yo quiero claridad en la Justicia, esto que se haga de nuevo. Según dice la gente de la Justicia usted no tendría las facultades para rechazar por sí mismo el concurso, estamos hablando del concurso de jueces, y se ha generado una situación institucional bastante grave, tal vez la más grave que ha sucedido en la Provincia en los últimos años…
- Así es, yo creo que esto amerita ir a una discusión de fondo, me parece que hay que discutir una nueva ley de funcionamiento en el Consejo de la Magistratura, lo que ha sucedido ahí es una irregularidad manifiesta, hay un problema serio. Cuando yo de acuerdo al pedido obviamente de la Justicia convoqué cinco concursos para cubrir cinco vacantes en cinco salas de la Cámara Civil, se convocó a cinco concursos separados, autónomos, independientes. Pero una vez que ya se habían inscripto todos, el Consejo de la Magistratura resuelve unificar los cinco concursos, entonces una persona se inscribió para un concurso en tal sala, y acá lo metieron como en una especie de gran licuadora y le dijeron: “bueno, vos te inscribiste para esta”, y los metieron a todos juntos modificando una cuestión sustancial del concurso, que era concursar para un solo cargo.En cambio los hacen concursar a todos para cinco cargos. Totalmente irregular.
Segundo, termina haciéndose público que algunos de los concursantes ya tenían antes del examen el conocimiento absoluto del caso porque lo habían trabajado a ese caso siendo funcionarios de la justicia, y a todo eso después se le suman las denuncias de arbitrariedad en la asignación de puntajes, entonces frente a toda esa situación irregular la pregunta es la siguiente: ¿El gobernador de la provincia tiene la obligación de validar un procedimiento que hasta está siendo discutido en la justicia?
Veremos qué resuelve la justicia después. A mí me parece que no puedo designar a una persona, porque lo dice la Constitución, que no está en la terna. Pero si esa terna está viciada de nulidad producto de que se hicieron las cosas irregularmente, no me pueden sumar a mí dentro de eso que yo considero que es claramente irregular.
Por eso me parece que en la provincia es una buena oportunidad para sentarnos a discutir esto.
Ahora, ¿cómo se sale de acá, doctor? Ayer había hablado con el doctor Carranza, y las posibilidades, lo que hace a lo que usted puede hacer o no, lo que dice o no dice, lo que dice el Consejo de la Magistratura, lo que dice la Justicia, se excusaron de actuar en esto seis ministros de la Corte, quedó uno solo, el doctor Abel Cornejo, y la verdad que después que habló de toda esta situación el doctor Carranza dijo: “Esto se encarajinó todo” como diciendo no hay una salida institucional a esto que esté marcada por la Constitución. ¿Es tan así?
- Definitivamente en la provincia no tenemos antecedentes, sí en el dictamen que me envió la fiscalía hay antecedentes obviamente comparados en otros lugares, en donde se advierte hasta dónde está la responsabilidad que tiene el Poder Ejecutivo y hasta donde naturalmente tiene facultades para hacer lo que yo he hecho. Lo que está claro que a mí no me van a obligar a convalidar a una maniobra irregular que se realizó, no sólo modificando cuestiones sustanciales como concursos sino también generando una enorme inequidad entre los concursantes, planteando un concurso, algunos concursantes que ya sabían los resultados porque lo habían hecho, y otros que no, o sea alguna gente fue a hacer la prueba con todo el caso ya resuelto.
¿Cómo es eso?¿Cómo se explica a la sociedad que por distintos artilugios corporativos el Poder Ejecutivo, y particularmente el gobernador de la provincia, termina siendo cómplice de la irregularidad? Yo no lo voy a hacer, entonces naturalmente de acuerdo a la opinión de la fiscal de Estado nosotros tenemos las facultades para hacerlo. Hay que esperar también qué resuelve la justicia porque también está siendo impugnado el proceso, entonces yo no voy a sumarme a generar mayor gravedad institucional trabajando sobre ternas que están siendo hoy investigadas por la justicia.
Ahora, doctor, cuando usted habla de maniobras, si estamos hablando de maniobras quiere decir que a usted le consta o a la fiscal le consta que se estuvo trabajando en el tema con maniobras corporativas. La denuncia que está haciendo usted como gobernador de la provincia, ¿es directamente hacia el Consejo de la Magistratura?
- Efectivamente es así, o sea estuvo en los medios de comunicación, o sea los concursos ya eran públicos para algunos y no para otros antes de que el concurso se resuelva. Se llamó a cinco concursos y después se terminó resolviendo en una terna de 12, las ternas son de 3 no de 15.
Totalmente irregular el proceso, entonces la pregunta es: ¿El gobernador está obligado a hacer algo irregular porque otro lo hizo? Yo no lo voy a hacer porque creo que a mí la sociedad lo que me exige es generar mayor transparencia en esto, si hay que modificar la ley del Consejo de la Magistratura la vamos a modificar, veremos qué resuelve la Justicia, estamos hablando de una terna total y absolutamente discutida judicialmente, entonces realmente me parce que lo peor que se puede hacer en todos los aspecto de la vida es insistir en un error. Si alguien cometió un error lo peor es tratar de justificarlo de cualquier manera.Se hace de nuevo, con otro mecanismo, de una manera más transparente, que la gente se quede tranquila y no pasa nada.
Convengamos que cuando habla de la palabra error es una cosa y cuando habla de la palabra maniobra es otra…
- Por eso, el error es pretender utilizar al Consejo de la Magistratura con un mecanismo que no es transparente, está claro que no es transparente, no lo digo yo, lo dice la opinión pública, lo dice el pueblo de Salta. Lo que pasa es que acá está por un lado la corporación de la gente que trabaja en ese sector y por otro lado la opinión pública que dice ¡cómo voy a convalidar yo un concurso que de principio a fin está plagado de irregularidades! Es una cosa absurda.
Deberíamos refrescarle a la opinión pública quiénes integran el Consejo de la Magistratura porque acá estamos hablando del Colegio de Abogados, Colegio de Magistrados, estamos hablando de la Cámara de Diputados y hombres de la Justicia.
- Claramente, pero ese es el problema, yo no estoy acá para defender a las corporaciones sea quiénes sean y no quiero hacer ningún juicio de valor sobre los que actúan, porque es una cuestión personal. Yo lo que estoy planteando es que institucionalmente el gobernador de la Provincia no puede estar obligado a avalar una irregularidad. A mí la gente me eligió para mejorar la calidad de la gestión pública y no para avalar estas irregularidades.

Suponiendo que su planteo sea totalmente lógico, sea comprendido por parte del Colegio de la Magistratura y digan sí, la verdad que esto lo hicimos todo como la mona, como lo está planteando el Gobernador y se tienen que ir todos…
- Lo que tienen que hacer, es hacer las cosas bien….
Y la hicieron mal, se supone…
- Por eso, ahora está la oportunidad, el hecho de haber rechazado la terna permite que se puedan hacer las cosas bien, me parece que de eso se trata, el sistema de funcionamiento del Consejo de la Magistratura está regulado por la Constitución de la Provincia y luego por leyes reglamentarias. Creo que habrá que mejorar justamente el marco normativo a efectos de evitar que pasen estas cosas.
Usted me dice “está en la Justicia esto”, de los siete ministros de la Corte seis se excusaron, quiere decir que el resto tiene que resolver sobre esta situación. ¿Más allá de lo que se resuelva, usted está tranquilo con que lo que se va a resolver es lo que se ajusta a derecho o va ser parte también de una corporación?
- Primero, la decisión tomada por el Poder Ejecutivo en uso de las facultades que tiene el Poder Ejecutivo fue no convalidar esas ternas y devolverlas al Consejo de la Magistratura. La pregunta es la siguiente:¿mi tranquilidad está dada con un nivel de convivencia con distintas corporaciones en el ejercicio del poder o con lo que plantea la opinión pública?
Si yo validaba esas ternas hoy absolutamente todos, inclusive algunos de los hoy están planteando que yo no puedo intervenir, me estarían criticando por el favoritismo de haber puesto a gente que ya tenía la prueba en su poder antes de hacerla. ¿Cómo puedo yo validar eso?, no tiene ninguna lógica.
Yo lo comprendo perfectamente, pero también lo que le tengo que preguntar a usted entonces es lo que está directamente desconfiando del Consejo de la Magistratura y lo que exigiría es un cambio total de sus miembros, porque acá hay varias irregularidades.
- Lo que pasa es que la integración del Consejo lo marca la Constitución, no tiene nada que ver con las personas sino que tiene que ver con un procedimiento. Muchas veces, y yo he sido gobernador en todo este último tiempo, he recibido ternas y he enviado ternas al Senado que se han aprobado y se han designado jueces, porque no necesariamente en todas las veces se cometió irregularidades, en esta situación sí se cometió irregularidades. Entonces así como en las otras situaciones no hicimos nada porque estaba todo de acuerdo a la ley, hoy no está todo de acuerdo a la ley entonces hay que hacerlo bien. Pero no quiere decir que el sistema no funcione, evidentemente el sistema funcionó bien siempre, evidentemente también tenemos que entender para que funcione mejor habrá que sentarse y discutir de qué manera podemos hacer las cosas mejor.
De todas maneras yo creo que usted está reconociendo que hay un problema de una crisis que puede ser institucional en serio porque estamos hablando de un ejecutivo enfrentado con un poder judicial…
- Si hay un gobierno que ha trabajado en defensa de la autarquía del poder judicial es este. Está claro, y no van a encontrar en nueve años y medio de gestión absolutamente ningún magistrado ni nadie que diga que el gobernador o alguien del Ejecutivo dio instrucciones para que hagan algo. O sea, nosotros garantizamos la plena independencia de los poderes, o sea yo no puedo convalidar hechos que son irregulares porque yo termino siendo cómplice y no lo voy a hacer.
Y si la justicia le dice a usted que el concurso fue hecho bien, ¿qué pasa?
- Habrá que preguntarle a la fiscal de Estado qué es lo que hay que hacer, uno no está obligado a ir en contra de lo que marca la ley, si la ley determina que los concursos se deben realizar de acuerdo a determinados procedimientos y los procedimientos no se realizaron cómo se puede generar la obligatoriedad de algo.
Digo, porque está la pregunta, o sea lo que usted está consultando o lo que está trabajando la Corte va a tener que ser sobre esto…
- Hay un recurso que planteó uno de los concursantes, la otra cosa es la decisión que tomó el Poder Ejecutivo en virtud del dictamen de la fiscal de Estado respecto de la inconveniencia de avalar las ternas. No está vinculado a la resolución judicial, aparte de no estar vinculado es un agravante el hecho de que estamos frente a un proceso que está discutido judicialmente.
Entonces debo sacar la conclusión que usted en este caso no le tiene miedo al fallo sino que le podría tener miedo es a la corporación justicia.
- Yo no tengo miedo a nadie, tampoco le tengo miedo a Dios porque es justo, a la justicia no hay tenerle miedo. Pero objetivamente acá hay un dato de la realidad y yo no voy a avalar situaciones irregulares porque no corresponde.
Que se escuden en todos los cargos que quieran. Realmente no me tiembla el pulso.
A mí realmente la Constitución me avala a no justificar irregularidades, no tengo por qué hacerlo.